A principios de 2020, mientras el aprendizaje migraba con rapidez a las plataformas en línea, surgió un problema clave en cada nivel de la educación: cómo mejorar el acceso al aprendizaje para cada estudiante. Ya se trate de estudiantes con discapacidades o aquellos que no tienen acceso a dispositivos o a Internet de alta velocidad, la rápida transición al aprendizaje a distancia incrementó de manera radical los desafíos existentes para proporcionar aprendizaje inclusivo a todos.
Actualmente, un año después, cuando celebramos la 10ma versión anual del Día mundial para promover la concientización sobre la accesibilidad, existe una esperanza para enfrentar estos desafíos: la mayor conciencia y debates profundos sobre cómo ofrecer de mejor manera acceso igualitario al aprendizaje. Aunque gran parte del debate sobre el aprendizaje en línea se ha centrado en lo que se perdió sin la experiencia en el campus (y el impacto en la experiencia de los estudiantes ha sido sin duda importante), descubrimos algunas de las maneras en las que la tecnología para la educación puede ayudar a que el aprendizaje sea más accesible.
1. Tu sistema de gestión de aprendizaje está (muy probablemente) diseñado para brindar accesibilidad
Con solo aprovechar las herramientas en tu LMS, puedes mejorar en gran medida el servicio que presta a cada estudiante. Las herramientas tecnológicas de aprendizaje más importantes se crean de acuerdo con un estándar común, en este caso, las Pautas de Accesibilidad del Contenido en la Web (WCAG, por sus siglas en inglés), que fueron desarrolladas para proporcionar un estándar único y compartido a fin de aumentar la accesibilidad del contenido Web para cualquier persona discapacitada. Por ejemplo, Canvas LMS posee certificación WCAG 2.1 AA, es decir, refleja el cumplimiento sustancial de una entidad externa sin fines de lucro. Esto significa que, gran parte del trabajo para garantizar herramientas de accesibilidad y tecnología de asistencia funcionará correctamente con nuestros cursos.
Algunas herramientas de gestión de aprendizaje van aún más allá, pues ofrecen herramientas de accesibilidad nativas. Canvas posee un Verificador de Accesibilidad incorporado en la herramienta Editor de Contenido Enriquecido que comprueba los errores de accesibilidad comunes mientras un educador crea el contenido de su curso. Un ejemplo puede ser garantizar el uso de visualizaciones para personas daltónicas y texto alternativo a las imágenes para personas con problemas de visión. También es fácil agregar leyendas a un video creado en o cargado a un curso Canvas. Estas características simples eliminan en gran medida las conjeturas durante la creación de cursos accesibles.
Además, es importante elegir un LMS que se integre fácilmente con herramientas de accesibilidad de terceros que puedan ampliar las capacidades necesarias para satisfacer las necesidades de estudiantes diversos. Por ejemplo, Canvas se integra fácilmente con herramientas como Microsoft Immersive Reader y Blackboard Ally para ofrecer contenido a los estudiantes donde quiera que se encuentren.
2. Considera la experiencia del estudiante en toda la institución
Incluso antes de la expansión del aprendizaje en línea debido a la pandemia, uno de los principales comentarios que recibieron los desarrolladores de LMS fue: “ayuden a mi profesor a usar más y de manera más consistente la tecnología”. Para la mayoría de los estudiantes, la experiencia difiere bastante según el curso. Un estudio del EDUCAUSE Center for Analysis and Research (ECAR) de 2020 demostró que este deseo se manifestaba con especial énfasis en estudiantes discapacitados.
La necesidad de mayor consistencia ha estado presente por mucho tiempo en instituciones que tratan de equilibrar la libertad académica de su facultad con las expectativas de estudiantes cada vez más expertos en las nuevas tecnologías. Y esta consistencia puede tener un efecto negativo en la participación y los resultados de los estudiantes.
Si bien el nivel de apoyo y comodidad general del diseño pedagógico con la adopción de la tecnología puede variar ampliamente en toda circunstancia, podemos elevar la vara para mejorar la experiencia de los estudiantes con solo modelar mejores prácticas e informarlos de las herramientas que tienen a su disposición. Una buena medida para comenzar es entregar plantillas por institución o departamento que ayuden a generar consistencia visual. También puede ser de gran utilidad proporcionar a los educadores principiantes herramientas y trucos para adoptar en mayor medida un LMS y alinearlos con los “usuarios expertos en LMS”. Hacer de ellos parte de una comunidad de educadores que aprenden en conjunto y comparten sus logros es uno de los motivos por los que la Comunidad Canvas ha crecido hasta contar con más de un millón de usuarios activos.
La clave de todo es identificar aquellos aspectos que hacen única al aula en línea y combinada, y no limitarse a solo recrear el aula física. Pequeñas medidas como priorizar la entrega asincrónica a través de debates, grupos y colaboraciones, a la vez que incluye algunos elementos sincrónicos, pueden tener un impacto medible en los resultados de participación estudiantil.
3. Diseña pensando en las conexiones móviles
Ahora que muchos de los laboratorios informáticos en campus de todo el mundo están cerrados y numerosos estudiantes tienen dificultades para acceder a computadoras portátiles o de escritorio, los mismos estudiantes, casi en forma universal, han obtenido dispositivos que les permiten acceder a sus cursos desde la palma de la mano.
Si reconocemos la omnipresencia de los dispositivos móviles y los adoptamos, no como una distracción, sino como un modo principal de conectarnos con los estudiantes, podemos comenzar a optimizar el diseño de nuestros cursos para llegar a los estudiantes donde se encuentren.
Sencillamente, si entendemos que los estudiantes prefieren usar aplicaciones móviles nativas que aprovechan las notificaciones y las herramientas incorporadas en sus teléfonos, contrariamente al proceso generalmente tosco de acceder al contenido de un curso a través de un navegador móvil, ello puede tener importantes implicaciones en la creación de un curso.
Un hecho es claro: la educación está experimentando un cambio. Durante tiempos de cambio rápido, no podemos perder de vista que lo fundamental es la accesibilidad para millones de estudiantes y educadores, sin distinción. De hecho, debemos consolidar nuestro compromiso de diseño accesible. Al identificar y adoptar mejores prácticas en el uso de la tecnología, podremos seguir prestando servicio en un panorama educativo en constante evolución.
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